sábado, 18 de enero de 2014

MI AMADA MUJER OSCURA

Con la luna nueva aguarda en las sombras como la más negra pantera.
Felina y oscura, elegante y silenciosa.
En plenilunio aulla al cielo transformándose en una loba blanca.
Sabia y ancestral, protectora y sigilosa.
Porque si la agreden se convertirá en la cobra más venenosa de la historia egipcia.
Y si un hombre intenta oprimirla se lo comerá vivo cual viuda negra o mantis religiosa.
Esa mujer oscura que según el momento se esconde o brota.
Dadora de vida y de placer.
Susúrrala al oido que la quieres.
Libérala, desátala... no la recluyas en lo más profundo de tu ser.
Que corra con el viento.
Que fluya con el agua.
Que las cadenas del conformismo no la postren en un suelo humedo lleno de desaliento,
como esas aves migratorias que no aprendieron a volar y se condenan a morir en el más largo y crudo invierno.
Que no derrame ni una lágrima más de las estrictamente necesarias.
Fundete con ella, con la mujer salvaje y libre.
Esa gran mujer que domina el mundo con sus pensamientos.

Meditando...

Si ves sin antes mirar...
¿Qué es lo que esperas?
Si buscas sin nada hallar...
¿Para qué tantas carreras?

Respira y recapacita.

Trás una puerta hay una emoción,
trás unos labios un suspiro.
Trás una ventana un horizonte
y trás un camino un destino.

QUE DÍA MÁS BONITO

Dias bellos ya se levanten nublados o soleados.
En los que solo se puede sonreir y gritar al mundo
que la vida es jodidamente bonita.
A pesar de todos los pesares.
Pese a quién le pese.
Amando por encima de todo al corazón que palpita indomable y salvaje.
Vislumbrando el horizonte con una mezcla de alegría y de coraje.